De Vicente Blasco Ibáñez
Dirigida por Magüi Mira
Marta Torres pone esta versión del emblemático texto de Vicente Blasco Ibáñez, escritor y político valenciano de finales del XIX, comprometido con el progreso de las clases rurales, en manos de la directora Magüi Mira. Garantía de una puesta en escena innovadora con un pulso narrativo que atrapará tanto como la inmortal novela.
La historia que cuenta La barraca conmociona por la actualidad de sus personajes y de sus conflictos. La barraca habla de la subida injustificada de los alquileres, de desahucios, de acoso infantil y del enconado enfrentamiento entre nativos e inmigrantes. Una historia que nos conecta con la estrecha relación de la identidad y la autoestima. Que nos conecta con la vida real, la que percibimos y entendemos a través de los sentidos.
Sobre la obra
La barraca cuenta el rechazo al que se ve sometida la familia de Batiste Borrull al instalarse en una barraca y en unas tierras de la huerta Valenciana que anteriormente trabajaron varias generaciones de otra familia llamada Barret. Los hortelanos de la zona, arrendatarios todos ellos, pretenden mantener yermas esas tierras como símbolo de poder frente a sus arrendadores. El conflicto irá creciendo de intensidad hasta convertirse en tragedia.
El texto está estructurado en tres partes: Pasado y presente, Los intrusos y El fuego.
PASADO Y PRESENTE. En esta primera parte conocemos a la familia Borrull, la historia del desahucio de la familia Barret y el motivo por el cual el resto de la huerta impide que otra familia se instale en la que fue su barraca.
LOS INTRUSOS. En la segunda parte transcurren los hechos que van desde la llegada de la familia de Batiste a la barraca del tío Barret hasta la muerte de su hijo menor. Toda la huerta les hace la vida imposible, pero al conocerse tal desgracia, los vecinos se sienten responsables y mostrando una nueva cara revestida de piedad, acuden a la barraca para acompañar a la familia en su dolor.
EL FUEGO. El tiempo ha pasado. Los considerados intrusos son falsamente aceptados y viven como unos vecinos más, pero lo que tanto temían los huertanos, ha sucedido: los propietarios, viendo por fin habitada la barraca del tío Barret y perdido el miedo a los labriegos, vuelven a exigir más y más. Una noche de fiesta y bebida desata las emociones contenidas dando fin a la falsa concordia y provocando el trágico final.
Nota sobre el texto
La barraca es una historia de siempre que nos habla de la eterna lucha entre la razón y la violencia, de una comunidad enferma con comportamientos salvajes. Una historia que nos habla de la identidad tan necesaria que nos da el arraigo a la tierra en la que nacemos. Esa tierra que se convierte en desierto sin su alimento principal, el agua. Magüi Mira